Aiya escribió:
Igual son imaginaciones mías pero las joyas que utilizó en la vista de estado de Italia ¿no estaban como poco brillantes?, porque ves las suecas, o las holandesas y parece que tienen más brillo, puede ser mucho también el entorno, el Palacio Real tiene mucho tapiz oscuro y eso se come mucha luz, o falta de mantenimiento, porque si es lo último ya podrían cambiar a otra joyería.
Hola, buenos días. Es la primera vez que descubro este subforo "Punto de Encuentro". Ya me he presentado en otros
y estoy encantado de leeros y participar (leeros lo hago desde hace mucho).
Lo de poco brillantes, Aiya, creo que es por la "nueva" (es un decir, lleva unos años, si no décadas...) iluminación del Palacio Real de Madrid. Si os fijáis bien, las joyas de la misma reina Sofía brillan reluctantes, con un refulgor increíble, sin exagerar, en otros contextos. Por ejemplo, en el interior de la iglesia donde se casó la Princesa Victoria en Estocolmo. Hasta la joya más pequeña, como la pequeña joya pendentiff de brillantes con perlita de su etapa como princesa griega o su broche flor de lys de su madre desde la distancia nos guiñaba (perdón por la cursilada, me ha quedado así... juas!) La tiara de la Chata, muchísimo, y hasta las perlas de Isabel II se veían maravillosas (efectivamente, ver brillar así a unas perlas, con un tono no exactamente blanco, como achampañado, es sorprendente. Otras perlas no se veían así)
Ídem de lo mismo la tiara floral en el Palacio Real de Estocolmo que portaba la infanta Cristina (en la iglesia, mejor ponerse directamente las gafas de sol en donde sale ella de refilón un par de veces). Y así con todas las joyas de las egregias damas...
Haciendo una competición de brillos, y eso que por tamaños no son grandes, ambas llaman la atención -parecen más importantes-, junto la de greca de la Custodio del Trono de Rumanía.
Esas mismas joyas -como las de Margarita II-, en el exterior, a la entrada de la iglesia, por la luz de ese momento, lo hacían menos (y también dependiendo del trayecto) Si observamos bien las imágenes de estas joyas antes de la iluminación led de todo el palacio de Oriente, que es como el día frente a la relativa penumbra de antes, han perdido mucho esos reflejos. Sobre todo en el salón donde reciben por primera vez a los jefes de Estado y en otros lugares de nueva iluminación (como el Congreso de los Diputados, recordar el collar de brillantes y zafiros de Dña. Sofía en la jura del Príncipe de Asturias)
Un saludito