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Qué pocas luces ha tenido siempre Andrés, o espero que no sea otra cosa peor.
En 2008 Epstein fue investigado en Florida por multitud de casos de abuso y explotación sexual. Cosas de la justicia norteamericana, que se repiten una vez y otra más y que jamás comprenderé, Epstein se libró del juicio al llegar a un acuerdo con la Fiscalía del Distrito Sur de Florida (seguramente money) y aceptó una condena de 13 meses de prisión.
Después de eso, de cumplir su condena, continuó presuntamente haciendo más de lo mismo y Andrés siguió frecuentándolo (por lo que ahora pide perdón) hasta que estallaron nuevos casos de abusos y depravaciones varias, pero esta vez en Nueva York. La fiscalía de ese Estado dejó claro que no toleraría que el asunto se resolviera como hicieron sus colegas de Florida. Ellos iban a por la perpetua. Pero el suicidio de Epstein ha terminado con el que se esperaba como uno de los juicios más sonados y escandalosos de la historia (con permiso de Wenstein) dadas las conexiones políticas y con medio USA multimillonario que mantenía el susodicho. Las mujeres que han hablado y van a hablar estos días ante la Corte, ya no pueden obtener la justicia que pedían, por eso al menos se les está tomando declaración para que su testimonio conste como oficial.
Que una de ellas diga que Andrés sabía y conocía lo que hacía su entonces amigo (aunque él ahora lo niegue, se disculpe y afirme que se equivocó), es tan veraz y constatable como que tras la investigación, acusación, proceso y condena de 2008, el Duque de York mantuvo su amistad como si nada. Si al menos leía los periódicos de entonces, tuvo que saber qué clase de persona era Epstein. Eso es lo más grave, diga lo que diga la chica o aporte los detalles que sean. Andrés sabía quién era su amigo, aunque no tuviese la oportunidad de averiguarlo por si mismo. Se lo averiguó y mostró la policía, la justicia o en último caso la prensa, como a todo el mundo.
Eso ya, solo eso, está fatal y es lo que le deja a la altura del betún. Luego tiene los santos arrestos de pedir que cuenten más con él en los actos de la Familia Real o en lo que tenga pensado su hermano Carlos para un futuro. Claro que sí. Para él, ni la pena del telediario que sí han sufrido otros de sus familiares por cosas infinitamente menos graves. Véase su hermana Ana llevada a juicio y a total linchamiento mediático cuando lo de los perros (la demanda con toda la razón, pero el acoso y despelleje sufridos, no).
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